Las cosas no deberían acabar sin ni siquiera haber comenzado

¿Cómo se logra olvidar algo que no tuvo lugar?
Si nunca pasó, ¿por qué olvidar? Es más: ¿qué olvidar?


Pero es que esto terminó sin empezar.


De las cenizas surgió el fuego, un fuego que nada más encenderse, se extinguió.


Las mariposas se convirtieron en navajas intravenosas.


El Fin ocupó el lugar del título.
La tortura ganó al miedo.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Convivencias

Vidas pasadas

Ha llegado la hora de actuar